Platos húngaros - platos clásicos de la cocina del restaurante Fakanál

La sopa gulash con carne de vaca es uno de los platos más conocidos y populares de la cocina húngara: rico, sabroso y un auténtico clásico húngaro. Esta sopa rica y especiada es perfecta no solo como entrante, sino también como plato principal por sí sola, especialmente servida con pan blanco fresco y crujiente.

La base de la sopa gulash es carne de vacuno desmenuzada cocinada a fuego lento, patatas, nabos, apio, pimientos y cebollas, que se Condimento húngaro - pimiento rojo, alcaravea, ajo - es lo que le da su verdadero carácter. El plato es picante pero no caliente, con ricos sabores que pueden disfrutar todas las edades.

A gulyás su valor gastronómico también lo demuestra el hecho de que oficialmente Hungaricum desde 2017. También es uno de los platos húngaros más populares en el extranjero y se conoce con un nombre similar en muchos países. En nuestro restaurante, es uno de los platos más populares y solicitados, y con razón.

El guiso era originalmente cocinado en una tetera, cocinado a fuego lentoEl resultado son sabores especialmente ricos y profundos. La base del guiso clásico cebollas finamente picadas, pimiento rojo molido de buena calidad, ajo, sal, pimienta, comino y, de vez en cuando, un poco de pimentón picante.

Los dumplings cortados a mano -también conocidos como fideos- absorben perfectamente la espesa y picante salsa del guiso, haciendo que el plato sea aún más agradable. 

El sabor ácido y avinagrado de la mermelada casera de ortigas ayuda a contrarrestar la grasa del guiso, facilitando su digestión.

A estofado de cerdo con albóndigas es delicioso y llenador, exactamente lo que debe ser un plato clásico húngaro.

Según la receta tradicional, el codillo de cerdo se precocina durante mucho tiempo, luego se pone sobre una capa de patatas, cebollas, ajo y se fríe con especias hasta que se desmenuza. El nombre del plato se debe a que, tras cocer el pan, la pierna se colocaba en un horno caliente con patatas y cebollas alrededor, que se cocinaban lentamente juntas. Para que la piel quede bien crujiente y roja, hay que untarla con cerveza y seguir rociándola con la salsa de tocino mientras se cocina. 

Las patatas asadas con ella absorben los jugos espesos de la carneno sólo sirve como guarnición, sino que también enriquece el sabor de la carne, ya que los aromas de la cebolla y el ajo la impregnan. Este es el plato una vez que lo has probado, siempre puedes saborear la sublime armonía de sabores en tu boca. Perfecto para una comida o cena contundente. Si buscas sabores caseros de verdad en Budapest, no puedes perderte las chuletas al estilo panadero del restaurante Fakanál.

Elaborado en la cocina del restaurante Fakanál salchicha de cerdo casera con condimento tradicional húngaro La pimienta roja molida, el ajo, el comino y la pimienta negra le dan su sabor característico. A ampliamente probado, receta propia garantiza que lo mejor de la cultura salchichera húngara se refleje en cada bocado. 

Durante el proceso de cocción, la salchicha se cuece, la carne se cuece y la piel se dora, lo que da como resultado un sabor diferente y más intenso que el de la salchicha ahumada.

Servido con un repollo ligeramente caramelizado con miel, el sabor agridulce y la mostaza complementan a la perfección el Salchichas picante, creando la tradicional armonía de sabores húngara.

Uno de los platos más populares de nuestro restaurante es la clásica cazuela de patatas, elaborada con recetas tradicionales. La combinación de patatas cocidas en rodajas finas y en capas, huevos cocidos, crema agria espesa y salchichas caseras crea un sabor casero que rara vez se experimenta en un restaurante.

Durante la cocción, la salsa de salchicha impregna las patatas, mientras que los huevos y la crema agria se combinan para formar una nueva textura. La nata agria casera se añade al rico sabor. Y los pepinillos caseros que se sirven con el plato refrescan los sabores. 

Los extranjeros se quedan asombrados primero por la comida y luego por los sabores. patatas a la cazuela Un plato aparentemente sencillo, pero que sólo está realmente delicioso cuando se prepara con patatas, huevos de gallina de corral, nata agria casera y salchichas bien condimentadas. Estamos orgullosos de ello, así que lo hemos incluido en uno de nuestros menús degustaciónporque creemos que es un plato imperdible. 

Para preparar los muslos de pollo, salar la piel y cocinado hasta obtener una corteza crujiente, mientras que la carne se mantiene desmenuzable y jugosa en el interior.. El punto clave es la proporción óptima de condimentos, en la que ninguna especia tiene prioridad, sino que juntas realzan el sabor natural de la carne. 

Página siguiente verduras frescas a la parrilla - calabacines, pimientos, cebollas y tomates. Las verduras no sólo son ricas en vitaminas y fibra, sino que también aportan un toque colorido y visualmente atractivo al plato.

El pollo es de corral, por supuesto, las verduras son frescas y el condimento es húngaro.

El maridaje de muslos de pollo asados y verduras a la parrilla es un plato de carne conocido y apreciado internacionalmente que también es popular en la cocina húngara, por lo que resulta fácil de disfrutar para todo el mundo. Este plato es una opción ideal para quienes buscan una comida ligera pero sabrosa.

Los pimientos rellenos no fueron inventados por los húngaros, sino que se introdujeron entre la población del país durante los 150 años de ocupación turca. Rápidamente se popularizaron y pasaron a formar parte de la gastronomía húngara. En comparación con la receta original turca y serbia, ha adquirido su propia forma característica en la cocina húngara a lo largo de los siglos. 

La versión húngara se elabora con un relleno más sencillo. A una albóndiga de carne picada de cerdo, arroz y algunas especias rellena de un jugoso pimiento verde. También harán una albóndiga sin pimentón. Ambos se hacen en un cocinados hasta que estén blandos en una salsa espesa hecha con tomates de verdad. El sabor ligeramente agridulce de la salsa de tomate armoniza con el sabor carnoso y picante del relleno.

Las patatas cocidas con perejil fresco picado como guarnición añaden un aroma herbáceo al plato. En el restaurante Fakanál lo preparamos exactamente como lo hacían nuestras abuelas. Para nuestros clientes húngaros es una experiencia nostálgica, mientras que para nuestros visitantes extranjeros suele ser el primer encuentro con los auténticos sabores caseros húngaros.

Este plato de pescado, ligero pero con carácter, es una de las especialidades del restaurante Fakanal. La trucha húngara es un pez noble: sólo vive en aguas cristalinas, frías y ricas en oxígeno, como los arroyos de los bosques: su estilo de vida garantiza la pureza de su carne.

La trucha entera recién llegada se fríe en mantequilla hasta que queda crujiente, lo que le da una corteza dorada por fuera y conserva su textura jugosa y desmenuzable por dentro. El sabor natural del pescado hace que necesite pocos condimentos. Incluso a quienes no les gusta el pescado de mar salado apreciarán su carne crujiente, suave, casi sin espinas y suculenta.

Las patatas con piel que lo acompañan complementan a la perfección los sabores naturales, ligeramente a nuez, del pescado. Servido con limón y hierbas frescas, este plato es una opción ideal para quienes buscan una comida sana pero sabrosa y el sabor del pescado de agua dulce.

El pollo frito es una piedra angular de la gastronomía húngara. Aunque es originario de Viena (Austria), se convirtió en uno de los platos más populares de la cocina húngara a partir del siglo XIX, sobre todo para los almuerzos dominicales o festivos. 

Hay muchas alternativas para la piel que rodea la pechuga de pollo. Una de las favoritas del restaurante Fakanal es esta pechuga de pollo empanada especialque añade un delicado toque de sésamo tostado al salteado tradicional. Dorada por fuera y desmenuzable por dentro, la pechuga de pollo se sirve con patatas recién horneadas para una comida saciante, deliciosa y espectacular. Las semillas de sésamo no sólo aportan una textura crujiente, sino también un ligero sabor a nuez que abre una nueva dimensión a este conocido plato. La elección perfecta si desea sabores familiares con un toque de algo nuevo.

Los calabacines fritos son muy populares en la cocina húngara. Los húngaros saben pelar casi cualquier cosa, y esta hortaliza es especialmente adecuada para esta técnica. También es muy popular entre los vegetarianos porque el sabor suave de los calabacines se realza con el condimento y el pan rallado crujientei.

Así que es lógico que uno de los platos más populares del menú vegetariano del restaurante Fakanal sea el calabacín, dorado por fuera y jugoso y suave por dentro. Las crujientes rodajas fritas se sirven con verduras recién asadas: pimientos, calabacines, zanahorias, cebollas y tomates. La cremosidad de la mayonesa casera complementa perfectamente los sabores.

Este plato no sólo no lleva carnepero también es saciante y sabroso, lo que lo convierte en una gran elección no sólo para los vegetarianos. Los crujientes calabacines fritos y las ahumadas y dulces verduras a la parrilla son la armonía perfecta en un plato sano y colorido.

El strudel es un postre tradicional típico de la cocina húngara. Con su carácter artesanal y sus variados rellenos, ofrece a los comensales una auténtica experiencia gastronómica. El strudel se diferencia de todos los demás postres principalmente en que la masa es una masa fina estirada a mano. Su elaboración requiere gran pericia y experiencia. La crujiente masa frita sólo enmarca el espeso y sabroso relleno. Los sabores se pueden degustar en el restaurante Spoon:

Strudel de requesónEl requesón típico húngaro está aromatizado con vainilla. En el aroma se percibe la piel de limón rallada.
Strudel de manzana: El relleno está hecho con manzanas ácidas ralladas. El aroma es de canela y clavo.
Strudel de fresaEl strudel tiene un sabor característico gracias a los trozos de cereza ligeramente ácida y al relleno jugoso y suculento. El aroma es una mezcla de canela y vainilla.

Nos gustaría ofrecerle la oportunidad de probar nuestra calidad y cuidadosamente preparada nuestro strudel!